25 agosto 2013

Comida Japonesa, no solo sushi

La comida japonesa no se limita ni mucho menos solo a sushi, al contrario, hemos comido poco sushi durante el viaje. Y tampoco se come tanto arroz como pensaba. Más bien son los fideos el ingrediente preferido. Me recuerda un poco a España porque la gastronomía es muy variada según las regiones. Hemos intentado probar bastantes cosas pero se nos han quedado muchos platos en el tintero.

El ramen es sin duda el plato estrella en Japón. Consiste en una sopa con fideos de pasta que pueden ser más delgados o más gruesos, una rodaja de carne y a veces un huevo, cebolleta o algún alga. Aquí pongo dos ejemplos: el de la derecha tiene una montaña de cebolleta seca encima y el de la izquierda tiene una raíz  rara machacada y picante. 

 

El plato de debajo a la izquierda es de udon que son unos fideos más gordos, hechos de harina de trigo. El de la derecha es de soba que es pasta de color grisáceo. Este plato, que lo vimos varias veces nos pareció bastante sosillo, aunque la presentación del arroz es bonita, con unos encurtidos coloridos. Los encurtidos están en en casi todos los platos.


Aquí debajo tenéis uno que gusta bastante. Hay restaurantes que sólo sirven esto: anguila a la brasa sobre arroz. Y a la derecha, brochetas de pasta de arroz a la brasa. Éste sí que nos pareció soso. Nos compramos 5 pinchos para la cena y nos saturamos.


 En Takayama, un pueblito en los Alpes japoneses, están especializados en carne de la buena. A la izda podéis ver un guiso con un rábano blanco (daikon), típico de la zona. Y a la derecha, unos trocitos de carne que se hacen poco a poco sobre una hoja de magnolia (el fuego está debajo).


 Uno de nuestros favoritos ha sido la gyoza. Son unas empanaditas rellenas de carne especiada que siempre triunfan. Y a la derecha, tonkatsu (chuleta de cerdo empanada) con curry.


 Uno de las mejores ciudades en cuanto a gastronomía es Osaka. Aquí tenéis dos de los platos más típicos de la zona. Los primeros son okonomiyakis, que son como unas tortitas (con varias capas como huevo, brotes de soja, tempura, polvo de bonito...), se hacen a la plancha y normalmente delante de tí.


Y los segundos son takoyakis: unas bolitas rellenas de pulpo. Les suelen poner diferentes salsitas y cebolleta por encima. Y junto a las bolitas de takoyaki, tenemos un pulpo japo-gallego bastante picante y muy rico aunque llevaba vinagre en vez de sal. 


Un día hicimos un paréntesis y nos dimos un lujo indio. El cheese naan estaba impresionante :) El plato de la derecha lo tomamos en el restaurante que sólo tenía una opción en el menú, y era una especie de crêpe que salió bastante buena.



Las judías rojas que se ven en el plato de la izquierda son parecidas a las pintas y se utilizan en un montón de dulces aquí. En concreto, esto era un postre con judías y una bolita de arroz, no muy convincente. El sushi de la derecha es salmón a la brasa, lo probamos en Kobe en un restaurante de sushi muy curioso al que fuimos con Lindsey. Puedes pedir tu plato desde un ordenador al lado de la mesa y te llega sobre una cinta que pasa por las mesas. 


Queremos hacer un inciso sobre Okinawa. Esta región (siguiente post en el blog) está bastante aislada del resto de Japón y ha desarrollado una gastronomía un poco diferente. A la izquierda tenéis un guiso de cerdo con bastante grasilla, pero que sabía bien, se llama Rafute. A la derecha, un sashimi de carne de primera de vaca de la isla Ie. Lo que se pone al lado es jengibre marinado.


También hemos probado el Goya Champuru, a la izquierda, que consiste en un plato de huevo y tofu con el toque especial de goya que es una especie de pepino amargo. Por último, tomamos un postre rico: una tarta de batata morada que es típica de aquí, a la derecha.



Para terminar, las curiosidades. Aquí tenéis un menú en japonés. Nosotros descubrimos aquí que hasta tienen los precios en kanji a veces. Eso lo complica bastante, pero hay que decir que normalmente tienen los numeritos iguales que los nuestros. 
Debajo, unos snacks que nos compramos, por eso de probar cosas, pero que no triunfó mucho: son de judías verdes. Y por último, un grande: la hamburguesa que me zampé del VIPS japonés... de fideos!


En resumen, y a pesar de mis reticencias iniciales con esta comida, estoy muy satisfecho y no he adelgazado nada, mamá!

2 comentarios:

María dijo...

Chicos ahora aprended a cocinarlos, que lo probemos por aqui!! Que hambre tengo de leeros!! Un saludo!!

viki dijo...

Que rico...y lo he leido antes de comerme una pobre verdurita hervida...seguro que mas sosa que un pincho de pasta de arroz.